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Tema LA FE QUE CELEBRAMOS
Subtema Sacramentos de curación
Ciclo Educación Secundaria (+16 años)
Este material es parte de la ficha didáctica "Sacramentos de curación", disponible en recursos asociados.
SACRAMENTO UNCIÓN DE LOS ENFERMOS El docente presenta “La Unción de los Enfermos”. Para ello, se presentan breves lecturas del Evangelio (Marcos 6,13; Marcos 16,18; Santiago 5, 14-15) y se orienta la reflexión con las siguientes preguntas: • ¿Cuál es el principal elemento o signo utilizado por los apóstoles para entregar la unción? (respuesta posible: óleo, aceite bendito, aceite consagrado) • ¿Qué aspectos similares podemos inferir de estos textos con el texto anterior de Juan (Juan 10, 19-23) sobre el sacramento de la reconciliación? (respuesta posible: existe curación, en el sacramento de la confesión se otorga una curación o sanación espiritual, referida a nuestra alma; y en la unción se otorga una sanación espiritual, y si Dios lo permite, también corpórea. Lo central de ambos sacramentos es la sanación espiritual. También en ambos sacramentos existe perdón de los pecados). Luego, el docente invita a sus alumnos a observar dos cuadros: Cuadro anónimo 1 Unción de los Enfermos (Imagen 3) y Cuadro anónimo 2 Unción de los Enfermos (Imagen 4). Les pide reflexionar en torno a las siguientes preguntas: • ¿Cómo podrías describir lo que sucede en cada cuadro? Respuesta posible: Cuadro 1: vemos a una persona enferma siendo “ungida” por un presbítero con óleo en su frente. Respuesta posible Cuadro 2: podemos ver a una mujer recostada en su cama que al parecer se encuentra enferma, y a su lado está un sacerdote administrándole la unción. Detrás de él, vemos a Jesús junto con sus ángeles. • ¿Qué elemento en común puedes identificar entre la imagen 4 con la imagen 2 (sacramento reconciliación)? Respuesta posible: en ambos cuadros se ve a JESÚS actuando por medio del ministro. Luego de realizar una breve puesta en común, el docente explica a sus alumnos que al igual que en el sacramento de la reconciliación, en la Unción, es Jesús mismo quien a través del ministro visita, bendice y unge al enfermo. Es Dios quien entra en la vida de las personas para CONFORTARLAS y ACOMPAÑARLAS para ayudarlas a dar SENTIDO AL DOLOR Y SUFRIMIENTO. Además, la unción actúa como una «preparación» espiritual, para no caer en la desesperación. Algunos de sus gestos son el acto de “ungir” al enfermo con óleo y hacer la señal de la cruz en la frente y en las palmas de las manos. Luego el sacerdote pronuncia las palabras: «Por esta santa Unción, y por su bondadosa misericordia te ayude el Señor con la gracia del Espíritu Santo, para que libre de tus pecados, te conceda la salvación y te conforte en tu enfermedad o ancianidad». Quizás llevarlos a preguntarse ¿Porqué cuando estamos cerca de una situación de enfermedad o prontitud para morir nos acordamos siempre de Dios? Es decir, llevarlos a ver ese “algo más que se muestra como más evidente a la hora de la muerte”.